Perfil radiofónico | El 28 de Febrero de 1981 Queen tocó por primera vez en Buenos Aires
El conjunto inglés llegó al país en el marco de una gira sudamericana, bautizada The Game Toury de esta manera Freddie Mercury, Brian May, John Deacon y Roger Taylor llegaron por primera vez al país. El grupo inglés llegó en su mejor momento, en el marco de la gira de su disco The Game, acompañado de un uso técnico sin precedentes para el público local.
En aquellos días, la suerte del país estaba en manos de la dictadura, cargo del general Roberto Viola. El militar buscaba apertura cierta a espectáculos, que sirvieran para distraer el difícil momento que se estaba viviendo, sin conocer realmente el mensaje de la banda.
Los conciertos de Queen en el país fueron anunciados en el marco de los festejos del Carnaval del Club Vélez Sarfield. El 28 de febrero, 3 y 8 de mars, la famosa banda actuaría en Buenos Aires, además daría un show en Mar del Plata, el 4 de mars en el estadio «Mundialista», y el 6 en Rosario, en el «Gigante de Arroyito».
Queen aterrizó el 27 de febrero en Ezeiza, en un espectáculo procedente de Japón. Un gran número de fanáticos esperan la llegada de los músicos en el hall del aeropuerto. También llegaron algunos fotógrafos y periodistas con la idea de tener algún tipo de contacto. Una gran caravana de fanáticos, pero la gente de seguridad, los acompañó hasta un hotel céntrico.
Freddie, Brian, John y Roger se sorprendieron mutuamente. Algunos medios internacionales, como la revista Rolling Stone, llegaron al país para retratar el evento. La visita de Queen fue un evento inusual para el país y para lo que representaba el mercado musical internacional. Por primera vez, una banda importante accedía a bajar a Latinoamérica con todo el caudal de su música y una fuerte puesta en escena.
El esperado debut de Queen en Argentina el 28 de febrero. Un estadio colmado disfrutó de las canciones, un repaso por su carrera. El primer gran rock de estadio. Cada uno de los músicos, con Mercury a la cabeza, se entregó al delirio de los seguidores que no pararon de cantar y bailar.
Guión de Cecilia Claps y locución de Pita Fortín.